Este blog es para compartir a todos los estudiantes y profesionales de la Salud

domingo, 12 de agosto de 2012

APARATO GENITAL FEMENINO



APARATO GENITAL FEMENINO

El aparato genital de la mujer, profundamente situado en la excavación pelviana se compone de: un órgano glandular, el ovario, en el cual se forman los óvulos; un largo conducto, que se extiende desde la vecindad del ovario hasta el exterior del cuerpo y que recibe sucesivamente el nombre de: trompas de Falopio, útero y vagina; los órganos genitales externos.              
OVARIO:
Los ovarios o glándulas genitales de la mujer son cuerpo de apariencia glandular, destinados a producir los óvulos. Órganos esenciales del aparato sexual de la mujer. Los ovarios están situados en la región lumbar, a cada lado de la columna vertebral, por dentro del cuerpo de Wolf; únicamente más tarde, hacia el tercer mes de vida intrauterina, es cuando abandonan esta región para ir a ocupar, en el interior de la pelvis, la posición que ocuparan de modo definitivo. Ordinariamente llegan a la excavación al noveno mes.
                    

El ovario tiene la forma de un ovoide algo aplanado. Esta forma de almendra es la más frecuente en la mujer joven. Durante el periodo genital de la vida de la mujer el aspecto del ovario es característico. Sobre el color rosado se destacan surcos más o menos profundos, que dan a la superficie del ovario un aspecto resquebrajado debido a cicatrices de orígenes diversos.
Los ovarios son dos uno del lado derecho y otro del izquierdo. Su volumen varía mucho según las edades. Su peso varía mucho de acuerdo con su volumen; es de 50 a 60 centigramos en el recién nacido, de 2 a 3 gramos en la niña, de 4 a 5 gramos en la edad de la pubertad y de 6 a 8 gramos en la mujer adulta.
                    
Relaciones:
Para el estudio de sus relaciones se le describen: 2 caras (interna y externa), 2 bordes (anterior y posterior)y 2 extremos( superior e inferior).
Cara externa:
Se aplica sobre la pared lateral de la excavación pelviana, esta pared presenta en la región ocupada por el ovario una pequeña depresión que recibe el nombre de fosita ovárica y cuya situación varía en la nulípara y en la multípara.
Cara interna:
La cara interna, convexa, está cubierta por el pabellón de la trompa que se repliega sobre el ovario.
Borde anterior: 
Es más o menos rectilíneo. Da inserción a un meso peritoneal muy corto, el mesoovario, que une al ovario al ligamento ancho. En este borde se encuentra un espacio estrecho, llamado hilio del ovario, por donde penetran los vasos y nervios a la glándula.
Borde posterior:
 El borde posterior del ovario es libre, convexo y más grueso en el borde anterior.
Extremo superior:
 El extremo o polo superior del ovario es redondeado, los ligamentos lumboovaricos y tuboovarico se fijan en él. La trompa y el mesosalpinx lo cubren.
Irrigación e inervación:
 El ovario recibe su vascularización arterial de dos orígenes: la aportación principal es suministrada por la arteria ovárica, rama de la aorta; el origen secundario proviene de la arteria uterina por su rama uteroovarica.
Los nervios del ovario llegan a él exclusivamente por su pedículo superior, el de la arteria ovárica. Los nervios destinados al ovario constituyen un plexo periarterial denso, en el que los filetes nerviosos se anastomosan en todos los sentidos y penetran en su trayecto pequeñas masas ganglionares. Esto son nervios vasomotores, pero también nervios sensitivos, que transmiten las sensaciones dolorosas nacidas en el ovario.
EL CICLO MENSTRUAL:
Para ver el gráfico seleccione la opción "Descargar" del menú superior
Los ciclos menstruales son fases que se repiten periódicamente, en la que los órganos del aparato genital femenino sufren una serie de transformaciones que preparan al organismo de la mujer para un posible embarazo. Comienzan a producirse en la pubertad y finalizan en la menopausia, entre los 45 y 55 años de edad; en condiciones normales, comprenden alrededor de 28 días.
Los ciclos menstruales son provocados por unas hormonas que secreta la hipófisis, denominadas FSH y LH, y los estrógenos y la progesterona, las hormonas femeninas que son secretadas por los propios ovarios. Los fenómenos claves de estos ciclos ocurren en los ovarios, y son la ovogénesis, o maduración de los óvulos, y la ovulación, que es el desprendimiento de un óvulo maduro hacia una Trompa de Falopio.
Los ciclos menstruales típicos dura 28 días. Comienza con tres a cinco días de menstruación, o expulsión del revestimiento uterino, durante la cual los niveles hormonales son bajos. Al final de la menstruación, una hormona hipofisaria estimula el desarrollo de nuevos folículos en el ovario. Éste secreta estrógenos cuando los folículos maduran, e induce la proliferación de las células del revestimiento del útero. Hacia la mitad del ciclo, un folículo maduro libera un óvulo. El folículo vacío forma el cuerpo lúteo, un cuerpo endocrino que secreta progesterona. Bajo la influencia adicional de la progesterona, el revestimiento uterino se engrosa y se hace más denso, como preparación para la implantación del huevo fecundado. Si la fecundación no se lleva a cabo, el cuerpo lúteo muere y los niveles hormonales bajan. Sin estímulo hormonal, el revestimiento uterino se deshace y es expulsado, comenzando un nuevo periodo menstrual y un nuevo ciclo.
TROMPAS UTERINAS:
Las trompas uterinas o trompas de Falopio son dos conductos, uno derecho y otro izquierdo, que se extienden del extremo del ovario, al ángulo superior del útero. Recogen, en el momento de la puesta, el óvulo de la superficie del ovario y lo transportan en seguida a la cavidad uterina, donde se fija y se desarrolla si ha sido fecundado, y de donde es expulsado al exterior en el caso contrario. La trompa se convierte en un verdadero conducto excretorio de la glándula genital.
                        
Situación: 
La trompa está situada en la aleta superior del ligamento ancho, entre el ovario, que está por detrás, y el ligamento redondo, que está por delante. Mientras que su ligamento interno se continúa con el útero, su extremo externo da origen a un pequeñísimo cordón, mitad muscular, mitad conjuntivo, que la une al ovario; el ligamento tuboovarico. La trompa se halla, pues, mantenida en su posición: por su continuidad con el útero; por su retención entre las dos hojas del ligamento ancho; por su ligamento tuboovárico.
Se distinguen en las trompas 4 segmentos: segmento intersticial, segmento ístmico, segmento ampollar o ampolla y el pabellón tubario.
Segmento intersticial: 
Situado en el espesor del músculo del cuerno uterino, mide aproximadamente 1cm comienza por un estrecho orificio, está el Ostium uterino.
Segmento ístmico:
 Situado en la parte interna del mesosalpínx, de paredes gruesas, mide aproximadamente 4cms. Se desprende del vértice del ángulo del útero, un poco por arriba y por detrás del ligamento redondo; por encima y por delante del ligamento uteroovarico.
Segmento ampollar o ampolla: 
Muy flexible, de 7 a 8 cms de largo. No es cilíndrica como el istmo sino aplanada, debido a su consistencia débil.
Pabellón tubario: 
En forma de embudo con contornos festoneados, forma las franjas tubarias, la más larga de las cuales se adhiere al polo superior del ovario. La superficie exterior es lisa y esta tapizada por peritoneo el cual solo se extiende hasta el origen de las franjas.
 Relaciones: cabe distinguir en las trompas dos partes:
                      
El segmento horizontal: 
Esta en relación, por delante, con el ligamento redondo, del que se separa cada vez mas. Por detrás, la trompa corresponde al ligamento uteroovarico; se sitúa encima de él y en su contacto. Venas bastantes importantes acompañan al ligamento. Las asas delgadas y el colon pélvico cubren a menudo la trompa.
El segmento ampollar:
 La cara externa de la trompa forma con el ovario la fosita tuboovarica. Por su pabellón llega a ponerse en contacto con la pared lateral de la pelvis, y, en particular, con los vasos ilíacos externos y el uréter.
Dirección: 
Seguidas desde su extremo interno a su extremo externo, las trompas presentan ante todo una dirección transversal hasta el polo inferior del ovario. Aquí se enderezan, subiendo verticalmente junto al borde anterior del ovario. Llegadas algo por debajo del polo superior de éste, se curvan hacia abajo y atrás, cruzando la parte superior de la cara interna del ovario, para seguir a lo largo del borde posterior del mismo, que rebasan por detrás.
Arterias:
 Las arterias de la trompa uterina proceden de dos orígenes: de la uterina y de la ovárica o espermática interna. Estas arterias se anastomosan en el ligamento ancho siguiendo la línea de soldadura de mesosalpinx y el mesoovario o aleta posterior.
Anastomosis no desdobladas: 
Es posible describir tres arterias tubáricas: una arteria tubárica interna o ístmica; una arteria tubarica externa o ampollar; una arteria tubarica media o intermedia.
Anastomosis desdobladas:
Cuando la anastomosis de la ovárica o de la uterina es doble, cada uno de los dos arcos anastigmáticos marcha aisladamente. El arco anterior esta en el mesosalpinx, en el que suministra las túbaricas interna y media.
Venas:
 Las venas nacidas de las redes capilares de las dos túnicas muscular y mucosa se dirigen hacia el mesosalpinx y forman, por su anastomosis, una red de mallas muy anchas, alargadas paralelamente al eje de la trompa. Finalmente, van a desembocar e las venas uteroóvaricas.
Nervios:
 Las venas nacidas de las redes capilares de las dos túnicas muscular y mucosa se dirigen hacia el mesosalpinx y forman, por sus anastomosis, una red de mallas muy anchas, alargadas paralelamente al eje de la trompa. Finalmente, van a desembocar en las venas uteroóvaricas.
UTERO:
El útero es un órgano hueco, de paredes gruesas y contráctiles, destinado a servir de receptáculo al óvulo después de la fecundación. Recibe este último al salir de la trompa, lo retiene en su cavidad durante su evolución y, cuando ha llegado a su madurez, contribuye con sus contracciones a expulsarlo al exterior. El útero se convierte así en el órgano de la gestación y del parto. Presenta la forma de un cono aplanado de adelante atrás, cuya base mira hacia arriba y cuyo vértice se insinúa en el orificio superior de la vagina.
  Situación: 
El útero ocupa la parte media de la excavación pélvica. Esta situado por dentro de las trompas de Falopio, de las que es continuación; por encima de la vagina, con la que se continua; por debajo del paquete intestinal, que resbala, no solamente por su fondo, sino también por la mayor parte de su superficie exterior.
Relaciones:
Extravaginales:
Anteriores: 
La porción peritonizada del cuerpo responde a los órganos intra abdominales: asas delgadas, colon pelviano y más abajo la vejiga.
La porción no peritonizada, del istmo responde a la cara posterior de la vejiga y de su base, de la que está separada por un tejido vesicouterino.
Posteriores:
 El útero está enteramente peritonizado y responde a la cara anterior del recto por intermedio de la excavación rectouterovagina.
Laterales: 
El útero responde aquí al contenido del ligamento ancho; el cuerpo responde arriba a la tuba uterina, al ligamento redondo, a los vasos arteriales y venosos uterinos. Abajo, la separación de las láminas peritoneales, frente al istmo circunscribe el parametrio.
Intravaginales: 
El cuello uterino está circunscrito por los formices. Dirigido normalmente abajo y atrás, el ostio uterino está en contacto con la pared posterior de la vagina.
Por intermedio de las paredes vaginales, el cuello uterino responde: adelante al tabique vesicovaginal atravesado lateralmente por los uréteres; atrás al recto; lateralmente a la parte más baja de los paramétricos, parte más ancha de los ligamentos anchos recorridos por los vasos vaginales y vesicales.
Irrigación del útero:
 La irrigación del útero proviene de dos orígenes, la artería uterina y la arteria vaginal larga, ambas ramas viscerales de la arteria hipogástrica (rama de la arteria iliaca interna).
VAGINA
La vagina es un conducto musculo membranoso muy largo, ancho y muy extensible a un tiempo, que va desde el útero a la vulva. Como continuación de la cavidad uterina, por ella pasan el flujo menstrual, los productos de secreción del útero, y el feto y sus anexos en el momento del parto. Sin embargo, el conducto vaginal desempeña esta función de un modo puramente accesorio. Su principal objeto es recibir el pene durante el coito, constituyendo en la mujer el órgano de la cópula. Presenta la forma de un cilindro aplanado de adelante atrás, con una longitud promedio de 8cms.
            
Situación:
La vagina órgano impar y medio, se halla situada en parte en la excavación de la pelvis y en parte en el propio espesor del perineo, al que atraviesa de arriba abajo y de atrás adelante para abrirse al exterior.
Delante de ella se encuentran la vejiga y la uretra, que la separan de la sínfisis púbica; detrás del recto, separándola de la columna sacrococcígea.
Configuración externa:
Presenta una forma cilíndrica, aplanada en sentido anteroposterior, en estado de vacuidad sus paredes anterior y posterior se encuentran adosadas la una a la otra, su pared posterior es más larga que su pared anterior. El extremo tiene la forma de una cúpula cuya concavidad corona el hocico de tenca. El extremo inferior esta aplanado transversalmente.
Se le describen para su estudio:
Dos caras anterior y posterior
Dos bordes, los bordes laterales de la vagina presentan dos segmentos: una intrapelviana que comprende aproximadamente los 2/3 del conducto vaginal y otra perineal.
Dos extremos: el extremo superior o cúpula vaginal se fija alrededor del cuello uterino, su extremo inferior se abre a nivel del vestíbulo vulvar.
Relaciones:
Anteriores: 
De arriba hacia abajo responde a la base de la vejiga; en su parte superior, el espacio vesicovaginal está atravesado oblicuamente por los uréteres que convergen hacia la base de la vejiga y abajo responde al cuello vesical y a la uretra rodeada de su esfinger estriado.
Posteriores:
 Responde al recto y los músculos elevadores del ano.
Laterales: superior; responde al parámetrio, medio: músculos elevadores del ano; inferior; con los músculos transversos profundos y las formaciones eréctiles del clítoris
GENITALES FEMENINOS EXTERNOS:
                                
Se designa así al conjunto de órganos ubicados debajo de la pared abdominal anterior en el perineo anterior, por delante del ano, por dentro y arriba de la cara medial de los muslos. Coronada por el monte del pubis (de Venus), la vulva, las formaciones labiales, el aparato eréctil y las glándulas anexas.
Monte de Venus: 
Es una saliente redondeada, situada debajo de la pared abdominal, delante de la sínfisis pubiana en la parte anterior de la vulva. Se cubre de pelos en la pubertad. Está formada por un conjunto de tejido celulograsoso donde terminan las fibras de los ligamentos redondos del útero. Su sensibilidad depende de las ramas genitales del plexo lumbar. Iliohipogastrico e ilioinguinal.
Formaciones labiales: 
Son los labios mayores y menores, en número de cuatro, dos de cada lado.
Labios mayores: 
Es un pliegue cutáneo, alargado de adelante hacia atrás, en el cual se reconoce:
Una cara lateral:
Muy pigmentada, con pelos y separada del muslo por el surco genitocrural.
Una cara medial:
Situada en contacto con el labio opuesto y separada del labio menor homologo por el surco interracial
Los labios mayores se unen por sus extremos; su unión posterior constituye la horquilla o comisura posterior situada inmediatamente por delante de la fosa del vestíbulo. El labio mayor está cubierto por un tegumento delgado bajo el cual se encuentra una capa muscular lisa; el dartos labial, al que cubre un tejido celulograsoso más o menos abundante. La piel de la cara medial contiene glándulas sebáceas.
             
Labios menores: 
Es un pliegue cutaneomucoso situado medialmente al labio mayor, adelante y lateral a la hendidura vulvar. Su extremidad superior antes de llegar al clítoris, se divide en dos hojas secundarias, anterior y posterior, la cara posterior, corta se dirige a la cara posterior del clítoris donde se inserta formando con la opuesta el frénulo del clítoris, la anterior, más larga, pasa delante de clítoris y se reúne en la línea mediana con el pliegue similar opuesto formando al órgano eréctil una especie de envoltura semicilíndrica, el prepucio del clítoris. El revestimiento cutaneomucoso posee una armazón fibroelastica y contiene numerosas glándulas sebáceas.
Espacio interlabial:
Aparece cuando se separan los labios. Por debajo del clítoris comprende de adelante hacia atrás: el vestíbulo, el óstio externo de la uretra y el ostio vaginal.
Himen: 
En la mujer virgen constituye una especie de membrana cuya concavidad se dirige hacia el centro del ostio inferior de la vagina, estrechándolo en parte. Es un septo incompleto que limita los conductos vaginales y vulvar. De forma variable, pero en general podemos encontrar tres tipos: semilunar, anular y labiado.
Aparato eréctil: comprende el clítoris y los bulbos vestibulares.
Clítoris: 
Es el homologo del pene en el hombre, aparece como una saliente submucosa, arriba del vestíbulo. Solo es visible la extremidad anterior, única y mediana de los cuerpos cavernosos adosados entre sí. Las envolturas del clítoris están formadas por la piel, tapizada por una capa fibroelastica. Los cuerpos cavernosos están constituidos por un tejido eréctil de grandes mallas vasculares; en cambio el glande no es sino conjuntivo, con revestimiento mucocutáneo de extrema sensibilidad.
Bulbos vestibulares:
Son formaciones eréctiles bilaterales, en contacto con la fascia inferior del diafragma urogenital; ocupan el borde adherente de los labios menores y cuyo borde interno limita con los ostios vaginal y uretral.
GLÁNDULAS ANEXAS:
Glándulas anexas uretrales y periuretrales: son poco desarrolladas.
Glándulas de Bartholino:
Son glándulas de el volumen de una almendra, situadas a cada lado, en la parte posterolateral del ostio vaginal. Están medialmente debajo de la mucosa; lateralmente en relación con el bulbo vestibular. Su conducto excretor se abre en la base de los labios menores, contra el himen. Estas glándulas, que se desarrollan en la pubertad, segregan líquido filante que lubrica las partes genitales, en el momento de las relaciones sexuales.
                    
Glándulas de Skene:
Son dos glándulas que cumplen la misma función que las anteriores y se encuentran una a cada lado del orificio de la uretra.
En otro orden de idea se abordará: un tema muy común en la actualidad como es la impotencia sexual, la cual es causada por diversos factores, como enfermedades, medicamentos, mal uso de la sexualidad; o también puede ser congénita. Esta puede presentarse en el hombre a partir de los 65 años o un poco antes. A continuación se describe brevemente algunos datos sobre la impotencia.
IMPOTENCIA:
La impotencia,  es la condición en la que un hombre es incapaz de alcanzar la erección del pene, por lo que éste no alcanza la consistencia precisa para la penetración en las relaciones sexuales. Esta condición se denomina también disfunción eréctil, que muchos médicos y psicólogos consideran que entraña menos connotaciones negativas que impotencia. (El término impotencia posee un significado más amplio que el estrictamente médico: también puede significar falta de poder o incapacidad).
La impotencia no debería confundirse con la eyaculación precoz, pérdida de la libido, o ausencia de orgasmo; en todos estos casos puede obtenerse una erección satisfactoria. La incidencia aumenta con la edad y se cree que el 25% de los hombres mayores de 65 años son impotentes. Ciertas enfermedades pueden contribuir a la impotencia; la diabetes mellitus predispone a los hombres a manifestar disfunción eréctil, y aproximadamente la mitad de ellos padece impotencia. Se cree que el aumento de impotencia se debe también al incremento de la longevidad de la población, que conlleva más actividad sexual entre los ancianos. Se han descrito tratamientos para la impotencia en la antigua literatura egipcia, griega y romana.
CAUSAS DE LA IMPOTENCIA:
En condiciones normales, cuando un hombre se siente sexualmente excitado, su pene aumenta de tamaño, poniéndose erecto y rígido, lo que le permite la penetración en el sexo de su pareja. El pene suele medir entre 7 y 10 cm de largo; en posición erecta el tamaño se incrementa hasta unos 17 centímetros. Leonardo da Vinci demostró que el pene se rellena de sangre para desencadenar la erección. De hecho, un pene erecto contiene seis o siete veces el volumen de sangre de un pene fláccido. Este proceso se controla a través del sistema nervioso vegetativo. La proporción de corriente sanguínea hacia el pene es mayor que la proporción de sangre que fluye del mismo, lo que provoca acumulación de sangre.
La impotencia puede tener causas psicológicas. Por ejemplo, si un hombre ha perdido su trabajo su sentimiento de fracaso le puede conducir a padecer una impotencia temporal. Con frecuencia puede asimismo estar ocasionada por trastornos del sistema sanguíneo, sistema nervioso, cerebro u hormonas, así como por daño o intervención quirúrgica en la pelvis o en el pene. Sin embargo, la causa más común es iatrogénica. Es decir, la impotencia puede estar ocasionada por los medicamentos que toman para tratar otros trastornos. Los diuréticos, los antidepresivos tricíclicos, los bloqueantes de los receptores H2, los betabloqueantes, las hormonas, por ejemplo, pueden provocar impotencia; una vez que el tratamiento médico ha llegado a su término, varía o se suspende, las erecciones deben producirse con normalidad (excepto que surjan, reiteren o transformen los problemas psicológicos que originaron el trastorno).
Es posible determinar si la causa de la impotencia de un hombre responde tan sólo a motivos psicológicos; si experimenta con normalidad una erección durante la fase REM (rapid eye movement) del sueño es improbable que exista alguna causa orgánica para que sufra impotencia cuando se halle en estado consciente. Sin embargo, en algunos casos, una causa orgánica que no es lo bastante grave por sí sola para producir impotencia puede hacer más vulnerable su desarrollo si también están presentes otros factores psicológicos menores.
EL TRATAMIENTO DE LA IMPOTENCIA:
El tratamiento de la impotencia habría de atender tanto las causas orgánicas como las psicológicas.
Hay diversos procedimientos para tratar la impotencia. Desde principios de la década de 1980 ha sido posible que los hombres afectados se inyecten fármacos específicos en el cuerpo cavernoso (tratamiento intracorpóreo). Esto afecta el tono de la musculatura lisa de los vasos sanguíneos, produciendo una erección que llega a prolongarse durante una hora (cuando se emplea durante largos periodos pueden aparecer problemas de cicatrización).
Un nuevo fármaco, puesto a la venta en Estados Unidos en abril de 1998, ha demostrado su efectividad en el tratamiento de la impotencia causada por envejecimiento, enfermedades vasculares, diabetes, operaciones de próstata, lesiones de médula espinal e incluso en algunas impotencias de origen psicológico. El sildenafil, que se comercializa con el nombre de Viagra, favorece el aumento de riego sanguíneo en el pene y provoca la erección. Este fármaco sólo funciona cuando el hombre está sexualmente excitado.
Otro tratamiento consiste en insertar una prótesis dentro del pene bajo anestesia, que puede ser un implante semirrígido o inflable.
Hay diversos prototipos en el mercado, conocidos como aparatos de constricción al vacío, que se usan para producir la erección. El pene se introduce dentro del aparato y por un sistema de vacío aporta sangre a los cuerpos cavernosos, provocando la erección. Se coloca un anillo elástico en la base para mantener la erección.
También está muy extendido el uso de tratamientos basados en varias formas de psicoterapia. Masters y Johnson propusieron en 1970 un programa de terapia conductual para ser llevada a cabo por el afectado y su pareja. Este método precisa de la colaboración de la pareja en cuanto que ésta no debe intentar la realización del coito en el plazo de varias semanas, y en tanto se cumpla dicho programa, desarrollarán otras facetas de su relación tanto en el plano físico como psicológico.
CONCLUSIÓN:
El aparato genital tanto masculino como femenino con sus estructuras específicas contribuye a la perpetuación de las especies animales específicamente a la correspondiente a los mamíferos, por medio de una serie de partes que actuando conjuntamente como un sistema biológico, e interactuando entre sí contribuyen al mantenimiento del equilibrio del organismo en condiciones normales.
Haciendo comparaciones es sencillo deducir que el aparato genital femenino, está constituido por menos partes que el masculino y aun así no lo hace menos complejo pues cada uno, con su propia fisiología tienen un fin en común, que no es más que producir las células sexuales o gametos(oogonios y espermatogonias) que por medio de procesos meióticos son originadas, y al momento de la fecundación producir un cigoto para perpetuar la especie.
Lamentablemente hoy día con las enfermedades de transmisión sexual, entre una de las más graves el SIDA, está acabando con miles de individuos diariamente. De igual manera el embarazo precoz, cuyo porcentaje es cada vez más alto, conduciéndonos a un país cada vez  más poblado y pobre. Esta pobreza se debe a que los sectores donde se observa gran cantidad de adolescentes embarazadas, es en los más pobres: esto se debe a que estos adolescentes no han recibido la información necesaria, acerca, de ciertos métodos  anticonceptivos y ,así evitar un embarazo precoz.
Esto como consecuencia de la pérdida de valores en nuestra población venezolana, pues lamentablemente se está percibiendo la práctica sexual desde otro punto de vista.
En otro orden de ideas, abordando el campo educativo es necesario "educar" en valores, además de la constante divulgación a través de los diversos medios informativos (audiovisuales, escritos, etc.) las medidas preventivas de las ets, así como también algunas otras patogenias como el cáncer de próstata, útero, etc.

No hay comentarios:

Entrada Popular